¡Hola querido blog! Ya tenía ganas de volver a escribir en tus hojas. Hoy lo hago para contarte una nueva experiencia y es que en el día de hoy he estrenado un nuevo rol, si la semana pasada me estrenaba como estratega-analista y comentarista, ahora ha sido el turno del debut del rol de player que consiste en jugar a un juego propuestos por las docentes, conocer el juego para poder hablar de que consiste, una opinión propia del juego, las emociones que me ha transmitido y como educador social donde podría usarlo para una intervención social. Empecemos con ello.
El juego que he elegido trata la problemática del medio ambiente y cómo nuestros actos pueden hacer de nuestro mundo un espacio más sostenible y saludable. He elegido este juego entre todos los que había porque el tema que aborda me interesaba bastante ya que es una problemática a la que no le damos demasiada importancia a pesar de que en los últimos meses gracias a movimientos sociales y populares llevado a cabo por adolescentes se ha conseguido poner un tema tan vital en el mapa y la agenda política de todos los países.
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El juego se llama 2020 Energy y consiste en regresar al 2012 donde deberás tomar ciertas decisiones para cambiar el presente del 2020 que te muestra el juego al principio con un vídeo explicativo donde se ve la problemática que parece no importarnos del cambio climático. Para ello te dan a elegir entre tres niveles diferentes donde debes encontrar la sostenibilidad del planeta y de la sociedad, aunque en esas decisiones no te encontrarás solos ya que tienes la ayuda de 3 asesores, que son: un asesor económico, una asesora de medio ambiente y una última asesora del ámbito de la sociedad ya que tus acciones no deben ser solamente ecológicas si no que deben ayudar a desarrollar la sociedad. Tú deberás de ayudar a ciertas personas en la toma de decisiones de sus vidas en esos tres niveles que son: ahorro energético, eficiencia energética y energía renovable. En cada nivel te plantean la problemática de la persona en cuestión y te dan una serie de respuestas en la que tu debes de elegir la que creas más correcta para solucionar esa problemática. Acto seguido tus asesores te dicen la consecuencia que tú decisión ha generado en su ámbito y te muestran un gráfico en el cual te indican si has sido sostenible (una decisión beneficiosa en los tres ámbitos), si tu decisión es viable (beneficia al medio ambiente y la economía pero no tanto a la sociedad), si ha sido apta (beneficiosa para medio ambiente y sociedad, no así tanto para la economía), si ha sido justa (beneficiosa para sociedad y economía pero no para el medio ambiente) o si solamente has beneficiado a un solo ámbito. Esto viene acompañado de una serie de recomendaciones para que tú en tu vida puedas ser sostenible con tus actos. Al finalizar el juego vuelves al 2020 pero no al que conocemos, si no con tus decisiones y puedes comprobar si ha cambiado, si sigue igual o ha empeorado.
El juego lo cierto que me ha parecido interesante ya que te hace ver como la decisión que tome puede tener efectos muy perjudiciales para la sociedad, o al contrario muy favorables para el desarrollo. Esto hace que cuando tomes la decisión pienses en que contestar más de un segundo y sientas ciertas tensión como si de verdad esa decisión fuera de una vital importancia y cambiaras el mundo en el que vivimos realmente. Me ha parecido un juego muy apropiado para todas las personas que deseen jugarlo ya que te hace replantearte la importancia y las consecuencia que tienen todos tus actos de la vida cotidiana, ya que uno de los ejemplos que el juego plantea, es tan normal como el elegir un vestido para una cita importante donde quieres impresionar con tu estilo y vestuario, siendo novedoso y nuevo pero a la vez sostenible en los tres ámbitos. No es un juego largo y pesado, más bien es un juego corto y efectivo, donde enseguida ves el resultado de tus respuesta, lo que hace que no te aburras y decidas abandonarlo antes de acabarlo como pasa con muchos juegos gratuitos árcades de este estilo.
Las emociones que he sentido al jugar, son emociones de responsabilidad a la hora de elegir una respuesta para la problemática propuesta pero también un sentido de impotencia ya que las decisiones son muy cotidianas y te das cuenta que por no darle la importancia tan vital que tiene el mantener la sostenibilidad a todos los niveles de nuestra sociedad ya que decidieron darle importancia a otros valores muchos mas secundarios como pueden ser el dinero, el egoísmo...
Por estas razones creo que es un juego que me puede servir para una futura intervención como educador social. Además es un juego que al estar dirigido a cualquier público lo emplearía en diversas actuaciones, como por ejemplo presentarlo en el centro de ocio o la casa de cultura de una localidad para que adultos, adolescentes y niños/as puedan jugarlo y crear esa conciencia para que toda la sociedad sea consciente que el hacer un mundo mejor es cosa y cuestión de todos/as, no solo de políticos/as de cada país. También llevaría este juego a colegios públicos e institutos donde los docentes podrían incluso a partir de este juego indagar mucho más en el tema en clases posteriores para crear aún mayor conciencia y educar a futuras personas que se preocupen por la sostenibilidad y desarrollo del mundo en el que vivimos ya que los jóvenes son el motor del cambio de una sociedad y son ellos los que deben empezar, como ya lo han hecho con movilizaciones y exigencias en frente de entidades públicas de ciudades importantes.